Los árboles lucen su belleza otoñal,
entre marchitos senderos del bosque.
En el crepúsculo de octubre el lago
refleja la quietud del firmamento.
Sobre el agua que desborda las piedras
hay cincuenta y nueve cisnes.
Diecinueve otoños soportan mis espaldas,
desde aquella vez que los contara;
observando cómo antes de que terminara
levantaban su vuelo de repente,
dispersándose en grandes círculos quebrados
y agitando sus alas clamorosas.
Yo apreciaba esas brillantes criaturas,
pero hoy mi corazón está dolido.
Todo cambió desde aquel ocaso
cuando por primera vez en la ribera,
escuchara el sonido de sus alas,
mientras caminaba con pasos más ligeros.
Amante con amante y sin fatiga
juguetean en las aguas frías
y se elevan por el aire raudamente.
Sus corazones no han envejecido;
merodean entre la pasión y la conquista
sin que las hayan olvidado.
Navegan sobre el agua inmóvil,
enigmáticos y bellos.
¿Entre qué juncos construirán sus nidos?
¿Al borde de cuál estanque o lago
deleitarán los ojos de otros hombres,
cuando yo despierte una mañana
para descubrir que me han abandonado?
William Butler Yeats (Dublín, 1865-Roquebrune-Cap-Martin, Francia, 1939)
(Traducción para SEPA por SMD)
“The Wild Swans at Coole” (Versión original en Inglés de William Butler Yeats)
The trees are in their autumn beauty,
The woodland paths are dry,
Under the October twilight the water
Mirrors a still sky;
Upon the brimming water among the stones
Are nine and fifty swans.
The nineteenth Autumn has come upon me
Since I first made my count;
I saw, before I had well finished,
All suddenly mount
And scatter wheeling in great broken rings
Upon their clamorous wings.
I have looked upon those brilliant creatures,
And now my heart is sore.
All’s changed since I, hearing at twilight,
The first time on this shore,
The bell-beat of their wings above my head,
Trod with a lighter tread.
Unwearied still, lover by lover,
They paddle in the cold,
Companionable streams or climb the air;
Their hearts have not grown old;
Passion or conquest, wander where they will,
Attend upon them still.
But now they drift on the still water
Mysterious, beautiful;
Among what rushes will they build,
By what lake’s edge or pool
Delight men’s eyes, when I awake some day
To find they have flown away? |